Muchos médicos suelen decir que los complementos no son necesarios. Sin embargo, cuando sobreviene alguna enfermedad y bajo determinadas circunstancias específicas, el organismo podría necesitar ayuda de los complementos. Aunque su uso no es imprescindible, para muchos especialistas hay ciertos factores que ameritan su empleo. Por ejemplo:

• Cuando la calidad de los alimentos no es la adecuada.
• En caso de que los procesos de envasado, almacenado, cocinado, destruyen gran parte de vitaminas, minerales y otros grupos alimenticios.
• Si las necesidades de los deportistas están por encima de la media sedentaria.
• Cuando la cantidad y calidad de algunos componentes, es insuficiente en una dieta habitual.
• Para los vegetarianos estrictos (aquellos que no comen ningún producto animal, también llamados  "vegans").
• Para las mujeres embarazadas o que están lactando.
• Para mujeres que tienen períodos menstruales fuertes.
• Para pacientes sometidos a una cirugía de derivación gástrica ("gastric bypass surgery") o que requieren bajar de peso.

Si últimamente te preocupa no estar obteniendo suficientes vitaminas y minerales en tu alimentación, habla con tu doctor acerca de cómo puedes obtener las cantidades adecuadas. Dependiendo tu estado de salud general, y de las vitaminas y minerales que hacen falta en tu dieta, él te puede sugerir el suplemento que más te convenga, independientemente si eres o no deportista.

Por último, jamás debes exceder la cantidad que tu médico te recomiende. El tomar una dosis mayor a la indicada de cualquier vitamina, mineral, proteína o suplemento herbal (productos fitosanitarios), puede causar efectos indeseables en tu salud.

Por José Manuel N.